Disciplinas como la psicología o la sociología han proyectado grandes trabajos y teorías orientadas hacia el estudio de las interacciones sociales, siendo parte importante los procesos colaborativos que se mantienen en la sociedades, su evolución, las transformaciones derivadas y su evolución a los largo de diferentes periodos. Desde la pedagogía también se han planteado numerosos estudios y teorías con el objetivo de mejorar los procesos de enseñanza y aprendizaje, potenciando un crecimiento integral, completo y más ajustado a la sociedad, abogando en la actualidad por un constructivismo social argumentado por Vygotsky.
La evolución de las nuevas tecnologías nos sitúa en un nuevo paradigma educativo, un nuevo proceso de enseñanza y aprendizaje donde el constructivismo social se deriva y transforma constantemente, precisando de nuevas proyecciones e implementaciones. Por ende, no podemos obviar la necesidad de estudiar, analizar, diseñar e implementar nuevos procesos orientados hacia una colaboración efectiva, coherente y de compromiso, que facilite y ayude a la consecución de procesos más profundos y eficaces, utilizando el poder grupal en red como elemento necesario de conocimiento.
Dentro de este marco podemos situar nuestra asignatura. Un espacio donde se han proyectado de forma amplia, guiada y planificada una serie de procesos de trabajo, de desarrollo con profundas implicaciones sociales al tiempo que colaborativas, donde cada miembro hemos precisado el uno del otro, y a través del cual nuestro grupo ha llegado a las siguientes reflexiones.